Tan fácil como eso. Y para muestra, las recientes operaciones llevadas a cabo por
Microsoft con Inflection, y por
Amazon con Adept. En el primer caso hablamos de la compañía creada por Mustafa Suleyman, cuyos directivos recibieron ofertas para incorporarse a
Microsoft â Reid Hoffman ya estaba en su consejo â y con ellos, la mayoría de los empleados de la compañía. A todos los efectos, se parece mucho a lo que
Microsoft propuso a los empleados de OpenAI tras el fulgurante despido de Sam Altman y Greg Brockman en noviembre de 2023. Pero para no ser una adquisición, el resultado de la operación es básicamente el mismo: te quedas con los empleados de la compañía y, por tanto, con toda su propiedad intelectual, aunque formalmente no cambie de manos. Lo que queda en Inflection, simplemente, se dedica a otra cosa.
A ese mismo esquema se ha apuntado ahora
Amazon en el caso de Adept:
Amazon hace ofertas de incorporación a los fundadores de la compañía y, con ellos, a dos tercios de la plantilla. Además, licencia la tecnología de la compañía, con lo que de nuevo, la propiedad intelectual no cambia de manos, pero a todos los efectos, la compañía ha conseguido exactamente lo mismo que lo que pretendía con una adquisición. Únicamente se ha quitado de encima a Lina Khan y a su equipo de reguladores.