Me parece una aproximación interesante y, tratar de explicar por qué la propuesta de fabricar iPhones en Estados Unidos, impulsada por la visión considerada por muchos analistas como simplista de Donald Trump no se sustenta en términos de viabilidad económica ni logística. En la práctica, podemos aplicar este mismo tipo de análisis a casi cualquier producto de electrónica de consumo dotado de un mínimo de complejidad.

Apple apunta a ser una de las empresas más damnificadas en la guerra arancelaria que mantiene Estados Unidos con gran parte del mundo y especialmente con China. Todo por mantener gran parte de la fabricación de dispositivos como el iPhone en China. Para Donald Trump la solución es simple: que los fabriquen en Estados Unidos. Para Apple, no es tan fácil.

De todos los planes que maneja Apple para impedir que los iPhone suban mucho de precio, el de fabricarlos en casa es el menos viable.

Durante más de tres décadas, Microsoft ha mantenido una presencia constante en China. Aunque el país representa solo una fracción de sus ingresos globales, la compañía de Redmond apostó por posicionarse allí con productos como Windows y Office, y con una red de centros de investigación orientados a colaborar con el ecosistema tecnológico local.

La carrera tecnológica de Mark Zuckerberg ha estado largamente documentada, como es evidente. Y no solo porque David Fincher dedicara dos años de su vida a relatar los inicios de Facebook, sino porque un tecnócrata siempre deja huellas.

Estamos en mitad de una guerra comercial. Sin paliativos: Estados Unidos anunció nuevos aranceles a más de 100 países, y China se iba a comer un 34% en todos los productos. Pues buen, China ha respondido literalmente con la misma cifra,  la imposición de otro 34%. Pero con sutileza: si los impuestos de exportación china entran en vigor el 9 de abril, los de China lo harán solo un día a continuación, el 10 de abril.

Proteger una carísima nave espacial con un producto de 32,99 euros. ¿A quién se le ocurre? A Astroforge, y yo hubiese hecho lo mismo. Tener un número de seguimiento facilitado por la naviera de turno no produce a nivel físico la misma seguridad que ver, cómo tus pertenencias viajan pero en todo momento están localizadas. El Airtag aporta eso.

Microsoft es una de las tecnológicas estadounidenses con mayor trayectoria en China. Comenzó a operar en el país en 1992 y ha mantenido desde entonces varios centros de investigación. Sin embargo, en los últimos meses ha dado señales de repliegue en un contexto de crecientes tensiones geopolíticas.

Muchos clientes de iPhone desearían poder usar iMessage en su ordenador con Windows, pero Apple ha restringido esta funcionalidad a su propio ecosistema. Sin embargo, gracias a diversas soluciones, hoy en día es posible recibir y enviar mensajes de iMessage en un PC con Windows utilizando diferentes métodos. En este artículo, exploraremos todas las formas disponibles.