Bruselas se ha convertido hoy en el epicentro de un nuevo escándalo de corrupción en el que estarían implicados miembros del
Parlamento Europeo y de la multinacional tecnológica
china Huawei.
La policía belga ha realizado hace unas horas una serie de redadas en oficinas y domicilios relacionados con la empresa en una operación que recuerda al caso 'Qatargate' de 2022: los indicios sugieren que
Huawei podría haber pagado sobornos a eurodiputados para influir en la toma de decisiones de la UE.
La denominada 'Operación Generation' (que investiga la comisión de presuntos delitos de soborno, falsificación de archivos, lavado de dinero y organización criminal) ha llevado a la policía belga a registrar 21 propiedades en Portugal y en las regiones belgas de Bruselas, Flandes y Valonia. Además, se han sellado dos oficinas en el
Parlamento Europeo relacionadas con asistentes parlamentarios sospechosos de estar involucrados en la trama.
Según fuentes cercanas a la investigación, alrededor de 15 antiguos y actuales eurodiputados estarían siendo el centro de las investigaciones. En caso de que termine siendo necesario proceder contra eurodiputados en activo, sería necesario solicitar el levantamiento de su inmunidad parlamentaria (aunque hasta el momento no se ha presentado tal solicitud por parte de la justicia belga).