Los últimos días de Microsoft no están siendo nada fáciles. La compañía ha anunciado el cierre de cuatro estudios -Arkane Austin,
Tango Gameworks,
Alpha Dog Games y Roundhouse Studios-, lo cual ha causado un revuelo enorme. La decisión empresarial, más allá del coste económico y en pérdida de puestos de trabajo, no ha sido bien recibida por la comunidad de los videojuegos.
Si ya era lo suficientemente dolorosa la situación, todo apunta a que se avecinan más cambios. Las turbulencias no han hecho más que comenzar en el seno de la división capitaneada por Phil Spencer, ya que se prevé que más desarrolladoras digan adiós dentro de muy poco.
Xbox Game Studios se ha despedido de un cuarteto de equipos talentosos que, habían publicado diversos proyectos en los últimos años. A excepción de
Roundhouse Studios con su traslado a ZeniMax Online Studios, el resto del personal se queda sin un lugar en el organigrama de la marca. La sangría de despidos no se circunscribe únicamente a la plataforma verde, sino que se trata de una problemática generalizada en la industria.
A raíz de lo sucedido con Microsoft, Dinga Bakaba, director de Arkane Lyon, estalló en X/Twitter contra la dirección empresarial y, según las fuentes consultadas por The Verge, se trata de un sentimiento compartido entre los empleados de Xbox.